El gran Paso

Ya habíamos tomado la decisión de abrir un café, cada vez maduraba más la idea en nuestras cabezas, queríamos tener claro qué era exactamente lo que queríamos ofrecer en este lugar; no sólo los productos a expender sino la armonía que debía existir entre el lugar, el ambiente, los productos y la atención. Creo que el nombre del Café lo explica mejor: Café Koinonía.

Koinonía es una palabra griega que significa compañerísmo o comunión. Como cristianos estamos familiarizados con esta palabra y eso es lo que queremos con el Café. Que sea un lugar de compañerismo, donde te puedas sentar con alguien simplemente a conversar acompañados de un Café, un chocolate caliente o un postre. Donde la conversación sea lo más importante, sin alguien que te pregunte: "¿se van a servir algo más...?" por supuesto, que queremos ofrecer los mejores productos que podamos. Mi esposa ha estado tomado clases de repostería por buen tiempo para lograr esto, por mi parte he tratado de aprender lo más que he podido en cuanto al café, y sigo aprendiendo. Gracias a Dios tengo amigos que son o han sido baristas de quienes he aprendido mucho. queremos que Café Koinonía sea el "rinconcito" de los clientes a quienes les gusta un lonchecito acompañado por alguien, que sea el lugar donde la pareja de esposos se escapan un ratito para pasar tiempo a solas; que sea el lugar donde se termine de concretar un negocio; donde puedas continuar la lectura de tu libro favorito; o donde puedas aplacar tu hambre antes de la cena.

Hemos tratado de armonizar un ambiente agradable mezclando luces cálidas y modernas, dibujos hechos a manos, etc, etc. Si eres observador(a) vas a notar esa armonia cuando vengas. Hemos tratado de ver las cosas como clientes, es decir, aquellos detalles que como clientes hemos apreciado en un establecimiento, queremos darle a nuestros clientes. No sé si te ha pasado que en un restaurant siempre te faltan servilletas, porque son tan pequeñas que desaparecen entre tus dedos al usarlas y siempre necesitas otra y otra. A mi me ha pasado muchas veces en Lima, en Cañete, en muchos lugares. Así que decidimos que vamos a usar servilletas de mejor calidad, estas servilletas cuestan más, pero es parte de la inversión. Estamos inviertiendo para servir mejor y sabemos que en el largo plazo es más rentable. No queremos caer en arrogancia y decir que somos el lugar perfecto o el mejor lugar de Cañete, estamos lejos de serlo. Creo que no pretendemos ser los "mejores", sólo queremos poco a poco ser especiales para nuestros clientes.

¿Sabías que hay diferentes formas de tomar el Café?
Permítenos contarte más en otra publicación.

No quiero terminar este blog sin decir que, Café Koinonía ha sido posible gracias a la colaboración de mucha gente. Primeramente nuestro Dios, quien usó a muchas personas con diferentes talentos para ser usados en este lugar. Cuando manifestamos la idea de querer abrir Café Koinonía, mucha gente se comprometió a apoyar. Así que si eres nuestro vecino es muy probable que hayas visto hace unos meses a mucha gente de diferentes nacionalidades trabajando en este lugar. Dibujando, pintando, limpiando, haciendo instalaciones electrcias, etc. etc. Este lugar ha sido levantado en Koinonía (compañerismo) y queremos que siga manteniéndose así. esa es nuestra visión.
Gracias a:
Iglesia Cristiana Koinonia - Lima, por su gran apoyo en este proyecto.
Adlai Cole, de Calvary Chapel in the City, Boston - USA, ella pintó un enorme girasol.
Tracy Shelley, Koinonia - Ica, ella pintó un hermoso cuadro abstracto en tres piezas.
Robin Shelley, Koinonia - Ica, él hizo la barra, el letrero, tapizó las sillas, etc.
Bay Life Church - USA. Amado y su grupo instalaron las luces, y la madera del salón.
Calvary Chapel Mimai Beach - USA, ellos nos trajeron un enorme molino de café y muchas otras cosas muy útiles para usar en el Café.
Ken & Mary de Calvary Chapel Orlando - USA, ellos nos enviaron bastantes tés en diferentes sabores y jarabes para el café.
y muchas personas más, cuyo apoyo ha sido determinante.